Estudié diseño en la UBA, Universidad de Buenos Aires, la carrera de Diseño gráfico, durante casi 7 años, mientras trabajaba e intentaba llevar un vida normal, con vida social y sin morir en el intento.

Al segundo año de cursada comencé a tener trabajitos de diseño, en la ciudad donde vivo, Escobar, gente conocida que iba pidiéndome algunas cosillas. En mi último año de facultad conseguí un trabajo en una gráfica, en donde aprendí muchísimo sobre impresión, y sobre todo el trato con el cliente cara a cara. Un año después, me incorporé en una agencia de marketing, en donde aprendí muchas cosas más, que en la gráfica seguramente no llegaría a descubrir.

Finalizando ese año, y a la par de mi trabajo fijo, comencé con demasiadografica, porque ya tenía bastante demanda laboral, y de alguna forma quería y sentía que tenía que mostrarme más, porque sin querer, los clientes y la cantidad de trabajo que tenía me iban dando el indicio de que trabajar sola era mi camino a seguir.

Antes de encaminarme totalmente en demasiadografica, tuve un último intento, en donde creía que lo fijo ‘era estabilidad’ y quise entrar en otra agencia de marketing, en la que duré litertalmente 1 HORA RELOJ -no saben el caos que era ese lugar- agarré mis cosas y me fui, contenta, porque sabía que demasiadografica era mi destino.